Celia y Laura, LAS HERMANAS GARCÍA, de la Costa Chica de Guerrero, México, han logrado ‘lo imposible’ con un éxito importante por sus interpretaciones de boleros y chilenas sin salir de su pueblo natal en donde no hay estudios de grabación, ni sala de conciertos, ni escuela de música. A pesar de esto, han logrado presentarse en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México, en conciertos masivos en Londres; registrar millones de escuchas en Spotify y visitas para sus videos en YouTube. Todo este éxito está al margen de la música comercial; ellas cantan y componen en el estilo de su propia región y, al mismo tiempo, dan vida nueva a los boleros clásicos, que pusieron el nombre de México en alto durante las décadas de los años 1940, 50 y 60.
Laura y Celia García nacieron en Ometepec, Guerrero, hijas del gran intérprete del requinto y arreglista, Mariano García y de la compositora Eugenia Santiago Chacón. Su padre es bohemio y amuzgo, su madre compositora y mestiza; de ellos heredaron la pasividad y la algarabía. Ambas llevan los viejos boleros de Álvaro Carrillo e Indalecio Ramírez en la sangre y conocen desde su infancia a los nuevos compositores de la región, que siguen la tradición del bolero costeño.
Para triunfar en la musica tradicional, ellas aprovecharon de una excelente escuela: la de su propia casa. Su padre, Mariano García es un virtuoso intérprete del requinto y tiene fama de ser el mejor arreglista de la Costa Chica. Él enseñó la voz a Celia y voz y guitarra a su hija mayor, Laura, que empezó a acompañarle a cantar en público, desde los nueve años. Por el lado materno, Eugenia Santiago proviene de una familia afromexicana, de cantantes no profesionales, que tiene varias chilenas de su autoría.
Esta preparación musical fue más que suficiente para que, a principios de 2016, los dos fundadores de una pequeña, pero renombrada, disquera mexicana, Discos Corasón, viajasen a la Costa Chica en búsqueda de las chicas y al escucharlas cantar, reconocieran su talento. Les propusieron producir un primer CD, ‘Que sepan todos’ y organizaron la grabación en un pueblo cercano, Cacahuatepec, en donde nació el legendario compositor costeño, Álvaro Carrillo, autor de ‘Sabor a mi’, entre otras joyas del bolero mexicano.
La grabación sobrepasó las expectativas y, en el mismo 2016, Las Hermanas García – con 16 y 14 años — se presentaron en el evento cultural de mayor prestigio en Latinoamérica, el Festival Internacional Cervantino. Inmediatamente, los medios nacionales empezaron a hablar de ellas en términos de “la nueva voz del bolero mexicano”. Al mismo tiempo, empezaron a llenar los foros culturales más importantes del país, con versiones propias de un repertorio muy querido en México.
El 14 de febrero de 2018 se lanzó en Ometepec el sencillo ‘Sabor a mí’ en amuzgo. Con esa presentación se pudo ver que el sueño de Las Hermanas García de contagiar a su propia generación con el bolero costeño, se estaba realizando. En junio de 2018 iniciaron su carrera internacional con una gira a Inglaterra de muy alto perfil con presentaciones en el enorme Festival La Clave, en la ribera del río Támesis; en la inauguración de la exposición, Frida Kahlo, Making Herself Up, en el icónico museo Victoria & Albert, entre otros conciertos en Londres y Oxford. Tanto los nuevos seguidores británicos como los mexicanos que siguen sus pasos con atención en México, votaron a favor de Las Hermanas García como ‘Artistas Revelación Internacional 2018’ en los Lukas Awards (los premios más importantes para la música latina en Gran Bretaña) y el dueto de Guerrero ganó el segundo lugar, por encima de artistas del nivel de Ibeyi, por ejemplo. El primer lugar fue para Bad Bunny, una estrella comercial de otra índole. Este éxito de Las Hermanas García es también un reconocimiento para la calidad de un repertorio viejo y nuevo y la capacidad de las jóvenes de interpretar estas grandes canciones con la naturalidad y la frescura que caracterizan la tradición costeña.
En febrero del año siguiente, Las Hermanas García cantaron en el Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México, en un concierto para el Centenario del compositor, Álvaro Carrillo. En los días previos, la familia del difunto compositor invitó a las Hermanas García a cantar en la tumba de Álvaro, con un público muy reducido de familiares y amigos.
Durante la Pandemia, Las Hermanas García coprodujeron, junto con Discos Corason, una serie de 10 conciertos que grabaron en la azotea de su propia casa en donde, entre los cantos de gallos y cohetes de vecinos que obviaron la prohibición de fiestas, cantaron el repertorio costeño que les caracteriza, además de invitar a artistas nacionales e internacionales que participaron generosamente en este proyecto que se hizo sin fines de lucro. En este foro de autogestión, conocieron virtualmente a artistas jóvenes con quienes han forjado una amistad que rompe con el aislamiento de la Pandemia. Entre sus nuevos amigos virtuales, apasionados intérpretes del repertorio romántico latinoamericano, se encuentran a Haydee Milanés, a Isaac et Nora, a Monsieur Periné, a Los Miranda y a Miriam Núñez, integrante del dueto ‘Las Hermanitas Núñez,’ que fue una inspiración para Mariano García cuando empezó a formar a sus hijas.
En febrero de 2021, Las Hermanas García se lanzaron como compositoras con su propio bolero, ‘Es noche otra vez’, con letra de Celia García y música de su hermana, Laura. Aunque existen muchas estrellas de pop, como Natalia Lafourcade, Santa Cecilia y Mon Laferte, que interpretan boleros a su estilo, Las Hermanas García se distinguen por componer ellas mismas nuevos boleros para su propia generación.
Celia y Laura, muy preocupadas por la amenaza tan real e inmediata de la crisis ambiental, lanzaron un sencillo, ‘Pobre Tierra Mía’ en abril de 2021, para coincidir con el Dia Internacional de la Madre Tierra. Su chilena, música bailable de la Costa Chica, fue muy bien recibida, con reportajes amplios en medios nacionales y, sobre todo, por la televisión y radio en los EEUU.
Otro deseo de las chicas ha sido llevar su música costeña a los paisanos radicados en California, Oregón y el Estado de Washington –toda la franja occidental de los EEUU– en donde mexicanos que trabajan en diferentes empleos guardan una nostalgia por los boleros y sones de México. El 8 de mayo de 2021 presentaron el primero de una serie de conciertos virtuales para migrantes, producido en Oregon por Eugene Arte Latino y Noches Culturales, y transmitido en los EEUU y en México.
Las Hermanas García ya son modelos a seguir para los jóvenes de la región. Su talento y sensibilidad han resultado en invitaciones a participar en la televisión nacional al lado de personajes de la importancia de Cristina Pacheco, Armando Manzanero y Rodrigo de la Cadena. En octubre del 2017 compartieron el escenario con el cantante y guitarrista cubano, Eliades Ochoa, quien comentó “son voces de terciopelo”, al escucharlas cantar. En abril de 2019, Las Hermanas García lanzó su segundo disco, ‘Sabor a mar’ en el que incluyen repertorio de otras costas de Latinoamérica, con su propia versión de ‘Lágrimas negras’, entre otros boleros clásicos que están revitalizando.
El éxito digital de Las Hermanas García es impresionante por tratarse de musica tradicional. El tema ‘Que sepan todos’ ha registrado más de cinco millones de escuchas en Spotify y ‘Sabor a mí’, cantado en español y en amuzgo, lengua natal de su padre, tiene más de un millón. La calidad musical y la sencillez de las dos jóvenes sigue cautivando a públicos de distintas edades y regiones de México, sobre todo en el estado de Guerrero cuya cultura musical merece conocerse más.
Para más información, comuníquese con Mary Farquharson mary@corason.com
